ECLIPSE es, sin lugar a dudas, una de las bandas de Hard Rock Melódico que más ha crecido en la última década. La formación liderada por el gran Erik Martensson ha conseguido dar un salto de popularidad importante en nuestro país gracias a discos plagados de himnos como fueron “Bleed & Scream” y “Armageddonize”. Así pues, siguiendo su tónica habitual de sacar nuevo álbum cada dos años, este 2019 se convierte en el año de “Paradigm”.
La primera sensación que tuve al escuchar “Paradigm” fue que ciertas melodías me resultaban bastante familiares. A decir verdad, Erik Martensson es un auténtico culo inquieto y cuando sus ECLIPSE están parados invierte su tiempo libre en bandas como W.E.T., AMMUNITION o NORDIC UNION, todas ellas de estilos bastante similares, cosa que me hizo empezar a pensar que el aparentemente inagotable talento del rubio pudiera estar empezando a dar muestras de agotamiento.
Decidí tomarme unos días de descanso antes de volver a pinchar el redondo de nuevo, así que con un poco más de calma volví a colocarme los auriculares para darle una nueva oportunidad que terminó desencadenando en un auténtico aluvión de nuevas escuchas. “Paradigm” me atrapó como no lo había hecho de primeras y, a pesar de que sigo teniendo algunos momentos de déjà vu durante sus continuas reproducciones, debo admitir que ECLIPSE ha vuelto a facturar un álbum que rebosa mucha calidad.
It is not probable that this monomania in him took its instant rise at the precise time of his bodily dismemberment.
“Paradigm” arranca de la mano de un auténtico bombazo como es “Viva La Victoria”, una pieza que huele a ECLIPSE por todos lados, convirtiéndose inmediatamente en un nuevo clásico de la formación sueca. La siguiente en volarme la cabeza es la dulzona “Mary Leigh”, una composición que la propia banda vendió como si se tratara de un hijo secreto entre ECLIPSE y AC/DC, una definición que personalmente no me termina de encajar del todo. A pesar de este detalle, lo que no se puede negar en absoluto es que nos encontramos ante un tema colosal que atesora un estribillo demoledor.
Los patrones compositivos de la formación sueca están bien definidos desde hace tiempo, temas directos, cortos y pegadizos. Estas son las tres reglas que ECLIPSE sigue a puño y letra para facturar temas tan sólidos como “Blood Wants Blood”. Mientras tanto, cortes como la balada “Shelter Me” o incluso “United”, que resulta familiar, rebajan un tanto la intensidad inicial de “Paradigm” y no se ve recuperada hasta llegar a “Delirious”, pieza que posee un riff de Magnus Henriksson que recuerda a los WHITESNAKE de la época del “1987”.
“When The Winter Ends” nos lleva hasta los terrenos de los medios tiempos más cantables, mientras que “38 Or 44” nos devuelve a los ECLIPSE más veloces gracias a un buen riff que marca por completo el devenir de la canción. Antes de terminar esta reseña me gustaría hacer mención especial a una de las canciones que tiene más números de permanecer en los repertorios de la banda, estoy hablando de “The Masquerade”, uno de los temas más redondos del trabajo y para el cual han estrenado un videoclip recientemente. La intensidad de la pieza va creciendo paulatinamente hasta desencadenar en uno de los solos más épicos e inspirados de “Paradigm”.
ECLIPSE ha facturado un notable “Paradigm”, trabajo que posee un buen puñado de composiciones brillantes que logran sobreponerse ante ciertos momentos de déjà vu producidos por algunos pasajes que suenan un tanto familiares. Gracias a este disco la formación de Estocolmo mantendrá su estatus como una de las bandas más fiables del Hard Rock Melódico escandinavo y les servirá como excusa para que Erik Martensson pueda volver a hacer una de las cosas que más le gustan en esta vida, que no es otra que girar por nuestro país.
ECLIPSE volverá este mes de noviembre a España, Madrid y Barcelon son las ciudades donde podremos disfrutar de “Paradigm”.